Will Smith y Chris Rock protagonizaron un escandaloso e histórico momento en la gala de los Premios Oscar. Frente a los invitados, el actor le pegó una piña al humorista porque bromeó con la calvicie de su esposa, Jada Pickett. La escena dio la vuelta al mundo y en cuestión de segundos se convirtió en tendencia.
La actitud de Will Smith ganó adeptos y también generó repudio en las redes sociales. Sin embargo, el actor tuvo el incondicional apoyo de su familia. Esto quedó en evidencia no solo en su esposa, la actriz y productora Jada Pickett, sino también en su hijo, Jaden Smith. El joven utilizó su cuenta de Twitter para respaldar a su padre. Con pocas palabras expresó "And that's how we do it" ("Y así lo hacemos nosotros") y de esta manera dejó claro estar del lado del actor.
Después de su violeta reacción en la ceremonia, Will Smith recibió un Oscar y pidió perdón por su conducta. "Quiero ser un embajador del amor. Quiero pedir disculpas a La Academia y a todos los nominados en mi categoría", expresó emocionado.
Al actor no le cayó bien que el comediante estadounidense tomara de punto a su esposa y se burlara de su calvicie, que es un producto de una enfermedad que aqueja a la actriz desde hace años y que ella decidió afrontar sin dramas.
En 2018, Jada contó que sufre este trastorno autoinmune. "No es fácil, pero voy a hablar de esto. Un día estaba en la ducha y de golpe me di cuenta de que tenía puñados de pelos en mis manos. Y pensaba Dios mío, me estoy quedando calva", contó Jada en Facebook. Y agregó, en ese momento: "He estado luchando contra la alopecia y, de repente, un día, mira esta línea de aquí.... Apareció así y va a ser un poco difícil de ocultar. Así que pensé en compartirlo para que no hicieran preguntas".